El proyecto de prórroga o aplazamiento del Registro Integral de Formalización Minera (REINFO) genera preocupación en el sector, pues podría tener efectos adversos en la formalización del oro y facilitar la operación de plantas procesadoras de mineral con procedencia poco verificable.
Según Roque Benavides, presidente de la Compañía de Minas Buenaventura, esta situación “ampliaría el poder de grupos que financian la criminalidad”, al tiempo que la minería ilegal pone en riesgo la seguridad hídrica y la biodiversidad del país.
Contexto y retos
El REINFO se creó como mecanismo para formalizar la minería artesanal y de pequeña escala. Sin embargo, diversos especialistas señalan que muchas operaciones inscritas no han avanzado hacia la legalidad real, sino que usan el registro como cobertura. Por ello, una nueva prórroga sin cambios estructurales podría perpetuar la informalidad y facilitar el blanqueo de minerales.
Diversas investigaciones estiman que más del 40 % del oro exportado por canales formales en Perú podría tener origen ilegal, lo que evidencia fallas en trazabilidad y control de plantas procesadoras.
Implicancias para el sector minero
Una prórroga amplia del REINFO sin mayores controles podría aumentar la presencia de plantas procesadoras que no acrediten el origen del mineral.
Esto pondría en riesgo la reputación del sector formal, afectaría la confianza de inversionistas y debilitaría los compromisos ambientales y de gobernanza.
Para la minería artesanal, mantener el REINFO sin exigencias claras reduciría los incentivos para avanzar en el proceso de formalización.
Hacia un marco regulatorio más robusto
El debate técnico y parlamentario plantea que el país debe priorizar:
sistemas de trazabilidad más exigentes;
supervisión rigurosa de plantas procesadoras;
plazos definidos para el cumplimiento de requisitos ambientales y técnicos;
fortalecimiento institucional para fiscalizar y sancionar irregularidades.
El reto es equilibrar la inclusión de pequeños mineros con la garantía de operaciones legales y sostenibles. Un aplazamiento sin condiciones podría comprometer ese objetivo.
Fuente: Diario Gestión











